“Ana
era una niña muy inteligente y adorable, hija de una familia normal
de América. Un día, cuando su abuela murió, fueron a su casa para
darle el último adiós, les gustó tanto la casa que, al final,
decidieron quedarse allí a vivir. Una noche se oyó un ruido raro:
-¡Pum,
pum!
Ana
subió corriendo al desván de la abuela.
-¡Pum,
pum!, se volvió a oir...
Pero
lo único que vió Ana fue unos discos viejos y un montón de cajas
polvorientas.
-¡Sssssss!,
oyó Ana...
Y
no se lo creía, la sábana que cubría las cajas se alzó al cielo
y empezó a volar.
Después
de esa noche no se supo más de Ana.”
¡Vaya misterio!!!!
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